A unos 80 km de la ciudad capital de Mendoza, en la pintoresca villa cordillerana de El Salto, específicamente en la zona de Alto Manantiales, se encuentra el acceso a la Cascada El Salto.
Localizada en la Quebrada del Salto, que se conecta con la Quebrada de la Manga, en pleno corazón del Cordón del Plata, esta cascada y su arroyo desempeña un papel crucial en el abastecimiento de agua para una de las zonas turísticas más importantes de la montaña mendocina.
Sus aguas de origen glaciar le otorga una pureza única, atrae a una diversidad de vida silvestre que incluye guanacos, zorros, pumas y una variada gama de aves. Es por esta razón que la Cascada El Salto se encuentra protegida por el Parque Provincial Cordón del Plata.
Para visitarla, es necesario tener en cuenta algunas consideraciones. Dado que se halla en una propiedad privada, es fundamental solicitar autorización con al menos un día de antelación para ingresar. A lo largo del recorrido, la señal de teléfono móvil es prácticamente inexistente. Sin embargo, llegar hasta su ingreso no es un problema, ya que se puede acceder en vehículo hasta el portón de entrada a la estancia. Además, la empresa de transporte público Andesmar conecta la terminal de Mendoza con Alto Manantiales, brindando una opción de acceso adicional.
El momento óptimo para visitar la cascada El Salto es de octubre a mayo, cuando su belleza está en todo su esplendor y el caudal del agua es más abundante. Durante el invierno, el frío puede causar que la cascada se congele en su base, añadiendo otra dimensión a su ya impresionante escenario.
